miércoles, 8 de septiembre de 2010

Así enseño

Desempeñando mi labor como docente en el nivel superior, he aplicado diferentes planes de estudio con sus respectivos modelos educativos y por lo tanto, mi forma de enseñar ha ido modificándose; pasando desde el modelo conductista (con el cual aprendí), el constructivista, para llegar al aprendizaje situado o significativo.


Puedo decir que mi forma de enseñar es ecléctica, tomo lo mejor de cada modelo y lo que me ha dado buenos resultados en los aprendizajes de los estudiantes.

Al iniciar un curso, siempre lo presento ubicándolo en el mapa curricular del plan de estudios, señalando sus antecedentes y subsecuentes; sin perder de vista los rasgos del perfil de egreso que son la guía para lograr los objetivos de los cursos. Se leen, analizan y aplican los textos que integran la antología.

Mi papel como docente es ser un guía y facilitador de la construcción del aprendizaje de los alumnos, en su contexto real. Aplicando métodos y técnicas que favorecen la enseñanza y el aprendizaje individual y colectivo.

Me interesa mucho la comprensión lectora y que los textos que elaboran los estudiantes sean realmente sus productos, valoro el trabajo que se realiza “a mano” y en el aula; no descarto el uso de tic`s (son mi reto) de manera moderada.

Busco que la relación con los alumnos se dé en un marco de respeto recíproco, tomando en cuenta los intereses personales y motivacionales de los estudiantes.

martes, 7 de septiembre de 2010

sábado, 4 de septiembre de 2010

Mi confrontación con la docencia.

Compartiendo la experiencia docente.

En la docencia no hay que hacer lo que se quiere, sino querer lo que se hace.



Este es un espacio que permite comunicar las experiencias que como docentes se viven de forma cotidiana, dentro y fuera de la escuela. Ser maestro, es una gran responsabilidad y compromiso, porque las enseñanzas y acciones que se ofrecen quedan grabadas en la mente y el espíritu de los estudiantes, niños o jóvenes que pasan por nuestras manos.

Confrontación con la docencia.

La profesión que ejerzo con orgullo desde hace más de 40 años… es la docencia. Me interesé por esta carrera por la admiración y el respeto que despertó en mí la distinguida Profra. Tomasa Gatica Marroquín, quien con mucha paciencia y amor me enseñó a leer y escribir.

Ingresé a la Normal Básica por iniciativa personal, nadie en mi familia antes había sido maestro; desde siempre me sentí atraída por entender y amar a los niños, y así dar un poco de lo que me brindaron mis maestros, amor y comprensión.


Los primeros años de mi labor docente los realicé en la educación básica, me desempeñé en los niveles: primaria, secundaria y normal; poco tiempo después me ubiqué solamente en este último, que al paso de los años se convierte en escuela de nivel superior.

Considero que elegí la carrera ideal y adecuada para mí, porque ser maestra me ha brindado la oportunidad de sembrar la semilla del saber y el conocimiento en los niños, así como despertar su interés por aprender las cosas bellas de la vida.

Durante mi desempeño como docente en los diferentes niveles, he cosechado muchas satisfacciones, por mencionar algo: “ver la carita de sorpresa y emoción de un niño cuando se da cuenta que ya aprendió a leer”; “que un adolescente mejore su conducta y rectifique la relación con sus padres”; y en el nivel superior, “que los ex-alumnos te recuerden como alguien que contribuyó con un granito de arena en su formación inicial.

Trabajar en el nivel superior requiere, además del compromiso como docente, de una constante superación y actualización para responder con eficiencia a los requerimientos del joven estudiante.

sábado, 28 de agosto de 2010

Mi confrontación con la docencia.

En este curso de Metodología de la Enseñanza II se nos encargó como actividad previa una reflexión relacionada con la experiencia que como docentes tenemos.